Cuenta una leyenda china que un hombre anciano, cansado por rodear dos montañas hasta su aldea, un día decidió que, si todos cooperaban y quitaban piedra por piedra, eliminarían el obstáculo y harían un camino plano y recto.
Hace tiempo una persona se encontraba en la ventana de su habitación, cuando de pronto vio a un grupo de jóvenes ingenuos caminando por la calle. Dentro de ese grupo de jóvenes, uno se veía un tanto simplón, burlón y hasta pudo darse cuenta de que carecía de entendimiento. Todo esto era al anochecer mientras caía la densa oscuridad.
Conectar con tus alumnos es una de las claves para que haya éxito al momento de enseñar en el aula. Conectar con tus alumnos es muy importante porque definirá la relación que tus alumnos tienen contigo, la forma en la que se sienten al verte, la idea que tienen acerca de ti y tu manejo de la clase;
Todos nos enfrentamos ante la decisión de: «¿a qué me voy a dedicar?», «¿qué voy a hacer con mi vida?», y entonces, por una y otra razón, algunos de nosotros elegimos adentrarnos en el mundo de la enseñanza.
En la actualidad, aún se cuestiona la necesidad o la importancia de la educación de nivel preescolar, sin embargo desde principios del siglo XIX e incluso antes a ésta fecha, se han realizado postulados a favor de la enseñanza desde la primera infancia, ya sea en casa o de forma escolarizada.
La curiosidad es un rasgo inherente en los niños que los impulsa a explorar el mundo que les rodea. Las preguntas juegan un papel crucial en el fomento de esta curiosidad, actuando como puerta de entrada al conocimiento y fomentando el amor por el aprendizaje.
¿Sabías que estos son tres ingredientes esenciales en el Sistema Educativo LAM?
Fui una alumna educada esencialmente en conocimiento. En mis años transcurridos por la escuela, todos los maestros afirmaban lo mismo: «Lo más importante es ser un niño inteligente», que se resumía en sacar 10 en todas las materias.
«¿Qué tanto le serviría a mis hijos o alumnos aprender robótica?». ¿Te lo has preguntado? La robótica no es simplemente una disciplina adicional para la certificación, o una tendencia temporal entre instituciones educativas o un distintivo para hacer que tu plan de estudios se destaque entre los demás.
En Sistema Educativo LAM estamos seguros de que el profesor es el elemento clave para que la educación sea efectiva. No sólo lo hemos escuchado en los informes de McKinsey, de pedagogos como la doctora Inger Enkvist, Juan Comenio o los modelos educativos más exitosos como el de Finlandia.
El salón de clases debe ser un ambiente seguro y enriquecedor donde los niños puedan aprender y crecer sin temor a la intimidación. Cuando los niños se sienten seguros y apoyados en su salón de clases, es más probable que prosperen académica, social y emocionalmente.
Los padres amamos ver crecer a nuestros hijos y, en ese proceso, no hay nada que disfrutemos más que el hecho de que sean capaces de vivir una vida llena de aprendizajes significativos.
El año pasado tuve el privilegio de leer un libro que transformó mi perspectiva en muchas áreas. Escribo este artículo para compartir una de las que considero más importante para el proceso educativo: la percepción que, como docentes, padres de familia o personas involucradas en la educación, tenemos acerca del concepto «disciplina».
América Latina está compuesta de alrededor de 630 millones de personas, de las cuales alrededor de 193 millones son niños, niñas y adolescentes. Según la UNICEF, el 63% de los niños y las niñas menores de 15 años en Latinoamérica sufren algún tipo de violencia física o psicológica dentro de su propio hogar.
¿Alguna vez tu madre o tu padre alzaron la voz? Creo sin duda que tu respuesta será «Sí» y ahora mismo estás recordando la razón o momento cuando lo hizo.
Segundo de secundaria. Un grupo de adolescentes que parecía no querer estar ahí. Mi primer semestre en una escuela nueva. ¿Mi tema? Biblia: los Yo Soy que describen a Jesús.
