6 recomendaciones para hablar de sexualidad.
Los seres humanos hemos sido hechos a imagen y semejanza de Dios. Podemos ver que desde el principio Él ya tenía una identidad muy precisa para cada uno de nosotros. Creó dos géneros: hombre y mujer. Este diseño ha permitido a los humanos desarrollarse a través de los años y tener una sociedad cada vez más estructurada.
En la actualidad, muchos niños han sido engañados y no conocen la verdad de Dios sobre su identidad sexual. La información que otorga la televisión, los medios, las redes sociales, la cultura e incluso otros niños a su alrededor, no puede ser la única fuente de información y mucho menos la mayor influencia sobre ellos. La responsabilidad de enseñar lo correcto y llenarlos de fe, afirmación y amor es de los adultos que los rodean. Recuerda qué enseñar acerca de sexualidad es un tema de identidad, pero también de seguridad.
Sabemos que cuando nos convertimos en padres, nadie nos enseña como orientar a nuestros hijos. Queremos darte seis recomendaciones para que puedas afirmar la sexualidad de tus hijos o alumnos. Creemos que serán de gran bendición y que pueden a hacer la diferencia e incluso pueden llegar a salvar su vida:
Quita todos los tabús. Hablar de sexualidad no debe ser incómodo. Dios nos creó, Él hizo todas las partes de nuestro cuerpo, Él asignó nuestro género y también diseñó el sexo. Recuerda que, si no lo hablas tú, alguien más lo hará. Asegúrate que la información que los niños a tu alrededor están recibiendo es la correcta y la adecuada según su edad.
Hagan un hábito de leer la biblia: Es de suma importancia y bendición involucrar a los niños en la lectura de la biblia. Todos los asuntos y temas importantes deben ser vistos y meditados a la luz de la palabra. En un estudio en los Estados Unidos del Centro de Conexión Bíblica realizado a 40,000 personas de entre 8 a 80 años, se comprobó que el leer 4 veces a la semana la biblia trae un cambio significante a las personas en su forma de vivir: sensación de soledad reducido a un 30%, problema con la ira se reducía un 32%, amargura disminuye un 40%, alcoholismo reduce un 57%, contacto con pornografía se reduce a un 60% y en el ámbito positivo el compartir de la fe aumenta un 200%.
Es importante que nuestros niños tengan el hábito de la lectura de la palabra de Dios y que desde pequeños tengan esa necesidad de conocer a Dios. Entre más conozcan a Dios, más afirmarán su identidad y conocerán el propósito que Dios quiere para sus vidas.
Prov. 22:6 “Instruye al niño en su camino, Y aun cuando fuere viejo no se apartará de él.”
Ayúdalos a valorar y sentirse orgullosos del género que Dios eligió para ellos. Los niños, desde temprana edad, deben tener el conocimiento de que Dios creó solo dos géneros. Hay grandes diferencias entre hombres y mujeres, pero ambos son muy especiales para el creador. Así mismo, aunque son distintos, tienen el mismo valor delante de Dios.
Genesis 27 “Y creó Dios a su imagen, a imagen de Dios los creó; varón y hembra los creó.”
Enseña a los niños acerca de las diferentes partes del cuerpo. Hay que enseñar a los niños que cada miembro que integra nuestro cuerpo tiene una función específica, hay que explicarles en qué momento se usa, para qué se usa, y de qué forma. Cada parte debe ser conocida por su nombre real y su función.
Todo el cuerpo es un diseño perfecto de Dios y es santo porque Dios lo usa como su templo.
1 Cor. 6:19 “¿O ignoráis que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, el cual está en vosotros, el cual tenéis de Dios, y que no sois vuestros?”
Enseña acerca de la privacidad. Hacerles ver por qué es que somos tan diferentes los hombres de las mujeres, va a permitirles saber qué, hay partes que ellos tienen que cuidar en todo momento. Nadie puede tocar nuestras partes privadas y ellos pueden poner el límite cuando se sientan incómodos. Al enseñarles a ser responsables de su cuerpo, les permitirá vivir una vida segura y lograrán estar preparados y alerta si se les llega a presentar una situación en donde otra persona tenga malas intenciones. Este tema se debe hablar con mucha transparencia e inteligencia dependiendo de la edad que tenga el niño, pero es importante establecer límites y darles la información para lograr evitar algún abuso.
Enseña la importancia de no guardar secretos entre ustedes. Habla acerca de que hay distintos tipos de secretos. Algunos son para dar una sorpresa o hacer feliz a alguien, pero hay otros que implican su seguridad o bienestar y para nada deben de guardar. Debes asegurarte de que ellos entienden la diferencia entre la verdad y la mentira y estar informados cómo pueden reaccionar cuando alguien les pide guardar un secreto. Establece un grupo de personas seguras para que ellos puedan hablar en caso de necesitarlo y asegúrate de siempre buscar un ambiente de transparencia e integridad para que ellos sepan con quién acudir.
Esperamos que puedas poner en práctica estos 6 puntos, sabemos que serán de mucha bendición para tus hijos y alumnos. Nunca subestimes su intelecto creyendo que es algo que aún no tienen la capacidad de comprender. Cuando no sepas cómo tratar un tema, recuerda que Dios te capacita y te da sabiduría para hablar con cada uno de ellos.
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