Cuando de nina vivia a orillas del lago Washington, Betty Greene tenia dos grandes pasiones: amor a Cristo y amor a la aviacion. Como joven piloto de WASP en la Segunda Guerra Mundial, Betty sonaba con combinar ambas pasiones usando alas para servir a Dios. El sueno de Betty se convirtio en realidad cuando colaboro en la fundacion Alas de Socorro, sus aventuras llenas de emocion y servicio ayudaron a crear lo que hoy es una organizacion global que opera mas de ochenta aviones en diecinueve paises.
5-6 GRADO PRIMARIA